Misa por D. Jose Manuel Madruga

El pasado viernes 20 de octubre, en la misa de 8 de la tarde, se celebró en nuestra parroquia una Misa- Funeral por nuestro sacerdote D. Jose Manuel. Fue una misa multitudinaria en la que junto a sus familiares asistieron muchos miembros de nuestra comunidad parroquial.

En los primeros compases  del mes de Octubre te has ido de puntillas, sin dar ruido, con discreción – como has vivido.

Nos has dejado perplejos, a pesar de que conocíamos tus dolencias, esas que tu arrastrabas sin quejarte.

Te has despedido de nosotros en octubre. Seguro que no es una casualidad. Este mes de Octubre misionero en el que tu mente albergaba tantos proyectos, diseñaba campañas, encuentros, colectas…. No te podías resistir a este “ajetreo misionero” de octubre. Y como no sabes decir que no, te ha pasado factura. Te has despedido a las puertas del DOMUND. Seguro que no es una casualidad.

Nos has dicho adiós cuando las choperas de se visten de matices  ocres, verdes y rojizos. Este paisaje que tanto te gustaba y que te hacía rememorar la infancia en Revilla Vallejera.

He tenido la fortuna de compartir estos siete últimos años contigo. Me has enseñado muchas cosas y seguro que también a los que hoy nos acompañáis de esta parroquia de San Juan Evangelista.

Manolo. Tú siempre te has mostrado inquieto, sugerente, provocador en la pastoral y en la evangelización, trabajador sin tregua, con una mirada de largo alcance que ha sido un acicate para todos y con una espiritualidad del éxodo.

Vienen a cuento las palabras del Papa Francisco con motivo del Domund de este año: “La misión de la iglesia está animada por una espiritualidad de éxodo continuo. Salir de la propia comodidad y atreverse a llegar a todas las periferias que necesitan la luz del evangelio”

Tu paso por la parroquia en estos siete años ha dejado su sello, tu huella de pisada firme.

Después de una vida entregada a la misión en la Dominicana y luego como director del IEME, lejos de descansar y dedicarte a pasear, a leer, a estudiar.., sin la complicación de las tareas pastorales, te metiste de lleno en la parroquia de San Juan Evangelista y sus afanes.

La primera decisión que tomaste de modo resuelto fue vivir en el barrio, cerca de la gente, alquilar un piso en la plaza, junto a la parroquia.

Desde los primeros días de tu trabajo pastoral en esta comunidad, fuimos descubriendo tus prioridades:

1. LA FORMACIÓN. Un “mantra” que repetías hasta la saciedad en la Parroquia y en el Arciprestazgo. Fruto de esta inquietud fue la formación de un equipo de Biblia y otro de pastoral. Con la formación de los laicos, - decías- nos jugamos el futuro de la iglesia. Y tienes toda la razón.
2. LOS ANCIANOS Y ENFERMOS. Por tu larga enfermedad, tenías una especial sensibilidad para con los ancianos y enfermos. Esa capacidad para animar a los que se enfrentaban a una operación, mostrando sin pudor tus heridas y también ese realismo a la hora de afrontar el final de la vida.  Creaste el grupo de visitadoras de enfermos y les animaste a la formación y la visita a las residencias de ancianos. Preparabas con mimo cada celebración comunitaria de la Unción de Enfermos.
3. LA DIMENSIÓN MISIONERA. Sobre todo de los niños. Con qué orgullo presumías de que los  niños de la catequesis parroquial eran los más generosos de la diócesis en la campaña de la Infancia misionera.
4. LA PARTICIPACIÓN DE LOS LAICOS EN LA VIDA DE LA IGLESIA. Cada uno con sus dones y carismas, tanto individualmente como formando parte de un grupo o movimiento.  Insistías una y otra vez en la necesidad de la acogida a los alejados. A los catequistas les urgías a salir a encontrarse con las familias, a los jóvenes y adultos a encontrarse con sus semejantes en la calle, en el mercado, en el centro cívico. Es tiempo de salir, de buscar, de ser una “iglesia en salida”, en expresión del Papa Francisco.
5. LA ATENCIÓN AL CONFESIONARIO LOS DOMINGOS. ¡Cuántos momentos los domingos, sentado en el confesionario, acogiendo a los penitentes, tanto niños como adultos!.

Permitidme terminar con dos textos: El primero del documentos del papa con motivo del Domund: “El evangelio es una persona que continuamente se ofrece y continuamente invita a los que la reciben con fe humilde y laboriosa a compartir su vida mediante la participación efectiva en su misterio pascual de muerte y resurrección. “ Tu has participado en tu vida, sobre todo estos últimos años de la  cruz de Cristo Estamos seguros que también participarás de su gloria.

El segundo texto es de Isaías 52: “Qué hermosos son sobre los montes los pies del mensajero que anuncia la paz….” Has dejado tus huellas en esta parroquia. No dejes de pasear en el cielo y desde allí, cerca del Padre, alienta nuestros desvelos.

DESCANSA EN PAZ, JOSE MANUEL.